¿Influye en algo el color del coche? Es posible que hayas escuchado alguna vez, que un coche rojo es más caro de asegurar o que un coche negro es más peligroso porque es más difícil de ver en la oscuridad y sí, hay parte de cierto en dichas afirmaciones, pero todo tiene su lógica. De hecho, el color del coche puede afectar incluso en las sensaciones que tiene quien conduce.
En España, por ejemplo, la universidad de Granada realizó una investigación con datos de accidentes de la Dirección General de Tráfico entre 1993 y 1999, con una conclusión interesante: los coches de color claro estuvieron menos involucrados en accidentes, mientras que en el extremo contrario estaban los coches de color oscuro. Unos datos que respalda el supuesto de menor visibilidad para los coches oscuros.
Dicho estudio también encontró una relación entre el color del coche y la agresividad. Los colores oscuros se asocian con mayor agresividad en los hombres, según confirmó el director del Instituto Universitario de Investigación de Tráfico y Seguridad Vial (INTRAS), Francisco Alonso. El color se relaciona también con la personalidad del conductor, que tiene preferencia por determinada tonalidad. No obstante, se aclara al mismo tiempo que los accidentes no son siempre culpa de una sola causa o factor.
Es cierto que durante un tiempo, determinadas aseguradoras tenían en cuenta el color del coche para calcular la cuota de la póliza, pero fueron pocas y actualmente, son realmente escasas las aseguradoras que lo realizan.
Otro punto a parte es el tema emocional, donde el color juega un factor fundamental. Es por ello que las marcas cuidan detenidamente el color de los coches que aparecen en las imágenes para medios de comunicación. Cuando se presenta un nuevo modelo, lo hace en un determinado color porque así se ha calculado, no es por casualidad o porque ese color le gusta más a los directivos, es algo estudiado al detalle.
Cuando se diseña un coche, también se tiene en cuenta determinados detalles para crear la paleta de colores que se ofrecerá al cliente y cada color, se asocia a una emoción o a un sentimiento que se quiere despertar. Por eso, por ejemplo, los deportivos suelen llevar colores vivos o los nuevos híbridos y eléctricos llevan colores como el azul o el verde, que se asocia con la naturaleza y el medio ambiente.