¿Qué son las lunas tintadas y para que sirven?

Las lunas tintadas. ¿Qué son las lunas tintadas? La respuesta es muy sencilla, aunque tiene algunos matices. Los primero que debemos saber es que todos los coches llevan lunas tintadas de fabrica. Incorporan un pequeño tinte para filtrar rayos solares en cierta medida, aunque seguramente, no sean estas lunas tintadas las que crean las dudas.

 

Hablamos de las lunas oscurecidas que usan algunos coches en los cristales traseros. Muy comunes entre conductores jóvenes, las lunas oscurecidas tienen muchas ventajas y además, las hay de varios tipos. De hecho, lunas tintadas sólo son de serie, es decir, de fábrica. El resto de lunas oscurecidas son lunas laminadas. Aquellas que se oscurecen con el coche una vez en la calle mediante lo que se conoce como láminas solares.

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Pero antes de seguir con el tema, hay que dejar muy claro que está prohibido por el reglamento de circulación, oscurecer todas las ventanas del vehículo (a excepción de los coches oficiales del estado). Está prohíbo oscurecer los 180º de visión del conductor, así que las ventanas laterales delanteras y el parabrisas nunca podrán ir oscurecidas.

 

Sabiendo esto, hay que sumar otras cosas más. Por ejemplo, hay diversos grados de opacidad (más o menos oscuras) y no se pueden instalar 100% opacas. Se debe poder ver el interior desde fuera. Igualmente, podemos elegir diversos tipos de láminas para nuestras ventanas en el mercado.

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Más allá de motivos estéticos, el más común cuando lo vemos en coches de conductores jóvenes, oscurecer las ventanas tiene ciertas ventajas que no siempre se tienen en cuenta.

 

  • Protegen el tapizado. Al filtrar cierta cantidad de rayos solares, el tapizado del habitáculo sufre menos los efectos nocivos de los rayos del sol.

 

  • Mejoran la climatización. El hecho de reducir el efecto de los rayos del sol, también reduce la temperatura del interior aunque lo dejemos horas bajo el sol. No es una reducción drástica, pero sí lo suficiente para que se note.

 

  • Aumenta la seguridad. Las láminas solares, como su nombre indica, son láminas que se adhieren al cristal. Esto tiene un efecto beneficioso en caso de rotura, ya que sujeta los fragmentos y no permite que se esparzan por el habitáculo y entre los ocupantes.

 

  • Ahorro energético. Con datos en la mano, las láminas solares son capaces de filtrar el 99% de la radiación ultravioleta y el 65% de la energía solar. Por tanto, el habitáculo se calienta menos y no es necesario usar tanto el sistema de climatización, lo que a su vez, repercute en un menor gasto de combustible que a la larga, se nota.

 

  • Reduce el deslumbramiento. Al tener un tono oscuro, no importa que tengamos detrás un coche con las luces de carretera conectadas (las luces largas) porque no sufriremos de deslumbramiento. O al menos, no lo sufriremos tanto.

 

El montaje de las lunas es relativamente sencillo. Ni siquiera es necesario desmontar las propias lunas y simplemente, se colocan las mencionadas láminas por la parte interior de las lunas. Puedes hacerlo tú mismo, pero suele ser más recomendable que lo haga un taller especializado y así evitar las burbujas de aire.

 

No es necesario pasar la ITV una vez puesta. No se considera reforma de importancia y por tanto no requiere de revisión, pero sí deberán ser láminas homologadas. Si las láminas no son homologadas, puede caernos una multa de entre 36 y 150 euros.